Todo se
acaba en la vida... Eso es evidente, y por eso no puedo evitar convertir en mi
credo el posicionarme en contra de cualquier cosa que llega a mis oídos y me
parece injusta y denunciable.
Un
hombre sabio, puede que el más sabio que conozco, me hizo un comentario con
todo el conocimiento que derrama una
persona que sentencia, seguro de sí mismo y sin ningún tipo de condicionamiento;
" la política es mentira..., es un engañabobos despiadado, y todo lo que
tiene que ver con ella no es otra cosa que pura demagogia".
No
sospeché en el momento de oír su teoría, cuanto de cierto reconocería ahora en
aquella afirmación.
Procuro
no arañar a la vida nada que no me parezca necesario, pero no puedo pretender
no ser ciudadano del mundo, ni coartar mi oído, mi inteligencia y mi razón, por
ese orden, guardando silencio ante tanta barbarie, mala intención o
incompetencia; o, un poco quizá de cada uno de los citados tres defectos, que
encierran gran parte de mujeres y hombres que conforman la clase política española.
Tanta
injusticia y tanto atropello, con mayor o menor intención acaban clavándose en
mi alma como a fuego y provocando mis letras más exaltadas.
Que voy
a hacer al respecto..., escribir es lo que tiene, que no es siempre una virtud
social que te permite hacer amigos, ni pretendo que todo el que me lea me
entienda o comparta mis argumentos; pero lo que en este blog plasmo, como
siempre, es mi opinión, a sabiendas y otorgándoles todo mi respeto a esos
muchos que piensan de otro modo , y me borrarán para siempre de entre sus
amigos de facebook.
Todo se
encendió en mi cabeza de repente, como
sucede cuando uno sufre cierto estimulo externo que le obliga a cobrar
consciencia sobre algo que siempre estuvo ahí, pero que por estar sumido en mi
conformismo, nunca despertó esa desidia a caer mal por decir verdades como puños,
que no todo el mundo quiere escuchar.
Se trataba
de ese anuncio de televisión, en la que una madre convence a su hija, dándole
un pedazo de pan abierto y vacío, para que valiéndose de su imaginación lo
rellenase de lo que más gustara, para que así tuviera una merienda suculenta.
Este
anuncio es de un dramatismo exacerbado y por desgracia muy real en demasiadas familias españolas.
El gesto,
tan bien caracterizado, de esa madre, abrazando a su hija con los ojos
inundados en lágrimas debió doler mucho a esos políticos, que tienen en sus
manos el poder evitar que tantos niños pasen necesidad, acertando con sus
políticas; y si no ocurrió así..., si ese gesto no les removió, además de que
no tienen conciencia, no son dignos de representarnos. Que no estamos hablando del tercer mundo, que
por desgracia siempre estuvo ahí, como símbolo del egoísmo humano; que ahora
estamos hablando de nosotros..., de los de aquí..., de nuestros hijos, de
ellos, que están pasando hambre mientras ustedes, señores políticos, me da
igual vuestro palo o vuestras creencias..., estáis quitándole el pan , y no
tenéis más preocupación que sentaros en un sillón para robar más; aquel que ya
nos ha robado, o para empezar a hincar el diente en el suculento pastel de lo
ajeno; aquellos que aún no han tenido la oportunidad de robarnos.
Ahora
seguid predicando vuestras virtudes, y las virtudes de vuestros programas...,
seguid en busca de todo ese poder que tanto deseáis.
Estamos
todos locos..., lo que más importa a los que nos queda algo de conciencia, es
que ese anuncio deje de ser verdad; que los padres nunca sufran la aberración
de ver que sus hijos pasan necesidad..., ese debe ser vuestro mayor anhelo...
Porque han conseguido que yo, y muchos otros como yo, tengamos que dar la razón
a ese hombre sabio que afirmó algo que, yo hoy, suscribiría a voz en grito, si
pudiera hacerlo en el mundo de las letras: - LA POLÍTICA NO ES MAS QUE UNA GRAN
MENTIRA-
https://www.youtube.com/watch?v=-rQP59rshCI
La codicia es el denominador común de los políticos corruptos del mundo, que todos no lo son. Pero sin duda, en los países que se debaten en crisis económica y deterioro social, abundan.
ResponderEliminarDice el dicho: "En arca abierta el justo peca", y, qué es y ha sido siempre el estado cuando se detenta el poder sino... una arca abierta.
La codicia y la impunidad los alienta, y si hay una mejora para el pueblo será porque ellos se enriquecen más, y seguirán robando, pero con el pueblo más alegre, con clase media y tarjetas de crédito por doquier, quienes, ya olvidadas las causas de su pasado reciente, dejarán de protestar en las calles porque ya no les preocupará ni tendrán tiempo para luchar contra la impunidad, por lo menos... hasta que otra crisis se haga presente.
Saludos, José Luís.
Muy ciertas tus palabras Pensador. Las mías, mis palabras, son fruto de la impotencia de tener consciencia de que no encuentro opciones políticas que no busquen otra cosa que poder y beneficios, en una sociedad que aún, en el siglo que vivimos, pasa necesidad en muchos casos.
EliminarPero es cierto habrá de todo dentro de cada partido.
Un saludo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola, José Luis. me ha gustado mucho lo que escribes, pero después de leer a pensador, no sé qué podría añadir. Queda todo dicho y denunciado con la intervención de ambos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola María.
EliminarMe alegra que te guste mi rabieta. Y tienes razón, con las palabras de Pensador creo que hay poco más que añadir.
Un abrazo, y discúlpame tú y todos, por mi habitual tardanza en contestaros.
Hola, José Luis. Te felicito por el post y, desde luego, no seré yo quién te borre de mi FB por decir una gran verdad. Besos.
ResponderEliminarHola Mercedes.
EliminarMe alegra que te gusten mis palabras, y gracias por no borrarme del FB, cuando escribo enfadado, como lo estaba en este caso, suelo acabar perdiendo amigos.
Un abrazo.
Estimado José Luis: me ha gustado mucho tu post y te digo como Mercedes..¿Por qué voy a borrar a nadie del Facebook por decir verdades como puños?. Cuando era niña recuerdo que mi madre nos daba un trozo pequeño de pan y lo acompañaba de una gotas de aceite...no había más. Nuestros políticos no tienen vergüenza ni entienden lo que es apretarse tanto el cinturón que ya te asfixia. Muchas gracias por escribir de forma tan sincera. Un beso
ResponderEliminarHola Agueda.
EliminarEntonces comprendes mi enfado. Es muy triste que en una sociedad moderna como la que tenemos, todavía haya en nuestra casa, padres que no tienen más que un pedazo de pan para ofrecer a sus hijos, mientras un montón de politicuchos, jueguen a ver el que la tiene más larga tratando de llevarnos al huerto, creyendo que ya hemos olvidado cuánto ladrón hay en las filas de los partidos que representan.
Un abrazo Agueda.
Hola, José Luis.
ResponderEliminarNo te conocía, o no sé si te conocía o no, y me he dejado caer por tus letras.
Me ha resultado agradable la lectura, además de entretenida. Y comparto lo que aquí nos dices con gran sentido común.
Sobre el anuncio con el trozo de pan vacío, ahora que lo dices…, ya sé a cuál te refieres, lo que ocurre es que no le ponía atención porque era en espacios de publicidad, y yo la publicidad o no la veo o la esquivo mentalmente. Por eso no me detuve a comprender el mensaje.
Pero, en mi opinión: No, no creo que eso (u otros mensajes por el estilo) escociera o hiciera algún efecto en los políticos. Esos bichos pasan de sentimientos. Y el decir que si a ellos les afecta... es darles demasiada importancia… como si fueran personas.
Y, estoy de acuerdo: «La política es una gran mentira»
Ahora, bien, creo que, al menos hasta que aprendamos a cambiar el Sistema, tenemos que intentar que esa falsa de la política no nos perjudique aún más, y votar en las elecciones a grupos que tienen al menos una mínima intención de políticas sociales, por eso, aunque esos bichos merecen ser aplastados… hasta que aprendamos a cambiar el Sistema continuaré votando a grupos de izquierdas, por su política social.
Celebro haberte leído, José Luis.
Un saludo.