martes, 15 de octubre de 2019

Soñar...



Necesitaba soñar para huir...Para quemar las palabras que tanto daño le hicieron... Que casi le arrancaron el alma.

Tenía miedo... a qué tras el sueño sólo hubiese silencio... Como mucho... efímeros recuerdos del pasado, cuando éramos el uno lo mejor de la vida del otro.

Recordar hoy... consciente de que mañana volvería a ser otro día igual... Tan gris como el de ayer... tan vacío como todos los venideros.

Sin ella ya no había nada... sólo frío... Un mundo inhóspito y desapacible.

Lo único que me mantenía vivo era la tenue esperanza, casi extinta, de volver a compartir algún día aquella luna entre palmeras… reflejada en sus ojos exultantes.