Dicen
que los que nos gusta esto de la darle a la letra, precisamos de un agente
externo que nos estimule a arrancarnos, y ponernos a escribir.
Es
cierto; al menos en mi caso. Yo necesito que un concepto, una noticia..., una
foto, estimulen mis neuronas de escritor.
Es el
caso de lo que me ocurrió esta mañana... Una foto, que me enviaron por wasap de
unos niños que conozco muy bien... Dos primos compartiendo los momentos previos
de ver a su equipo jugar un partido de futbol.
Vistiendo
los colores de su Málaga natal miraban a la cámara abrazados..., sonrientes...,
orgullosos de aquellos colores que vestían y hacían suyos.
Visionar
esa foto me supo mucho más que a eso; que contemplar la imagen de dos chavales que acuden a ver
jugar a su equipo... Me dejó el dulce sabor de un futuro mejor; ese sabor que últimamente,
no siempre estuve seguro de poder volver a alojar en mi paladar, y que tan
grato se me hace.
Sí...,
hay futuro..., seguro que lo hay; un hermoso futuro por delante.
No hay más
que ver a esos niños para ver que todo mejorará. Que ellos y tantos otros como
ellos, sabrán darle vueltas a este País, tantas como sean necesarias, para
convertir, únicamente en triste pasado, lo que ahora estamos viviendo.
Ellos
solo son dos briznas de hierba fresca..., dos brotes verdes en medio del erial en
que hemos convertido nuestra tierra…, desaprovechando nuestro tiempo.
Escondidos por el miedo al recuerdo del pasado.
Nunca
debimos conformarnos con el presente, justificando que el pasado fue peor.
Pero esa
foto me llenó de optimismo. Ellos están ahí... Y como ellos, otros muchos, a
los que sus padres; hombres y mujeres de bien, terminarán de forjar, ayudados
por lo aprendido; enseñándoles a no huir nunca de nada. Para que le den un
nuevo rumbo al mañana, y borren de un plumazo ese hoy que tanto nos preocupa.
Es por
ello, que vosotros, mi pareja preferida de hinchas del Málaga, me habéis
alegrado la mañana.
No olvidéis
nunca los nexos que os unen... Ni olvidéis esa foto, y lo que sentíais cuando
os la tomaron... Porque tenéis en vuestras manos lo más valioso que un hombre
puede tener... EL FUTURO.
Tienes razón José Luís, *EL FUTURO* es lo más valioso que tiene un ser humano, él alimenta sus sueños, le da valor para enfrentar la vida, seguridad para moldear su destino, fe para comenzar y fuerza para reiniciar. Sin futuro, se abandona ese impulso vital de crear cada nuevo día una razón para sentirse orgulloso y en paz con su conciencia y dignidad. Será por eso que las sociedades que padecen miseria material y pierden la esperanza de un mañana justo, se hunden también en la miseria moral a la que las arrastra el sistema, permitiendo que éste, les robe también, la riqueza que aún les queda: sus niños. Con esto me refiero a su formación, tan venida a menos coincidentemente en los países en que sus autoridades se enfangan en la corrupción -pero este es otro tema-, quiero decir, que descuidamos la educación de nuestros niños. *La educación comienza por casa* dice una antigua frase popular, y es precisamente lo que nos toca hacer a cada familia ya que el estado perversamente la descuida; debemos tomar conciencia que el futuro está en nuestras manos de adultos precisamente porque tenemos en nuestros hijos, un recurso humano que podemos convertir en riqueza. Si al margen de nuestra incertidumbre actual pensamos en la responsabilidad que tenemos, enseñaremos desde el calor de cada hogar a nuestros niños, a aprovechar su inteligencia, sentimientos y juventud, para construir la sociedad justa que anhelamos para ellos. Parece que fuera ocioso hacer esta recomendación, pero no es casualidad que de generación en generación repitamos por la presente: *Esta generación está perdiendo de vista los valores*.
ResponderEliminarSaludos, José Luís.
Pensador... hay tres palabras que serpentean por tu comentario, y que se me hacen muy gratas... Futuro...Esperanza y sentimientos. Creo que estas tres palabras son motivo suficiente para confeccionar una vida; pero quizá necesitemos algo más para convertir esa vida en algo tan maravilloso como la mayoría merecemos. justicia y libertad. Con esas cinco palabras..., si todos los padres fuesen capaces de convertirlas en el credo de sus hijos, estoy seguro que acabaríamos disfrutando un mundo mucho mejor.
ResponderEliminarUn saludo pensador..., me alegra saber de ti.
José Luis: me alegra saber que a los que nos gusta esto de darle a las letras necesitemos de agentes externos que nos estimulen mí sucede casi siempre así....me cuentan una historia, veo, escucho y zassssss...me viene algo a la mente y escribo. Hoy en día necesitamos justicia, libertad, esperanza y mucha paciencia. Un besito. ya sabes que me encanta leerte
ResponderEliminarEs verdad Águeda..., como funcionan nuestras cabezas, je..., je.
ResponderEliminarCierto, necesitamos que los niños aprendan bien los valores que los mayores vamos olvidando.
Respecto a lo de que te encanta leerme... Gracias, no merezco tanto honor.
Un beso amiga.